El Ayuntamiento pretende recuperar el aspecto original del Almacén de los Fúcares

El alcalde explica por qué se han pintado dos paredes del patio de este singular edificio como prueba

El Ayuntamiento ha pintado dos paredes del Patio de los Fúcares para probar cómo quedaría de blanco. El proyecto nace con el objetivo de que este edificio renacentista recupere su aspecto original de cuando fue construido en el siglo XVI como marca la Ley de Patrimonio. El lunes los pintores municipales comenzaron a realizar dos pruebas en dos paredes de la planta superior del edificio que ahora alberga la Universidad Popular y la emisora local, Onda Almagro. Una de las paredes se ha pintado en su totalidad. Y en la otra se han pintado exclusivamente los tapiales, los huecos que hay entre los ladrillos.

La medida ha causado revuelo en la localidad por lo que el alcalde, Luis Maldonado, ha explicado en los micrófonos de la emisora municipal los motivos por lo que se ha tomado llevar a cabo estas pruebas. “Cuando se restaura el edificio en los años 70 se queda sin terminar y desde ese momento desde distintos estamentos y personas relacionadas con el mundo del arte piden que al menos el patio se claree y se pinte de blanco porque este patio tiene unos elementos muy singulares, arcos, balaustradas, columnas y sobre todo el artesonado del techo que pasa desapercibido debido a la paredes que son oscuras”, comenta el primer edil.

Maldonado, conocedor de la historia y del arte de la localidad, también dijo que como edificio del Renacimiento “a nadie se le ocurría dejar los muros en ladrillo y tierra, en bruto” y la prueba son dos ejemplos de la época: el convento de los Dominicos y el Palacio del Viso del Marqués. Precisamente los arquitectos de este último, los estuquistas Peroli, también realizaron las molduras de escalera del Almacén de los Fúcares, de una de sus salas y del portal de entrada. También citó otros ejemplos de renacimiento mudéjar que se puede ver en otros lugares de España, como la casa de Pilatos o el Palacio de las Dueñas Sevilla, con paredes siempre blancas y con los arcos de ladrillo.

El regidor almagreño aclaró que es una simple prueba que habrá que someterla a los criterios de Patrimonio con las dos opciones probadas: “Estamos pendientes de un mejor criterio. No seré yo quien decida a la ligera, cualquiera que me conozca sabe de mi cariño y de mi defensa del patrimonio de Almagro”. Durante su entrevista, Luis Maldonado también mencionó a Fernando Chueca Goitia, catedrático de Historia del Arte, miembro de la Real Academia de las Bellas Artes y uno de los grandes restauradores de España, que decía que la moda de los años 60 de dejar las paredes en bruto era algo de los países pobres porque quien tenía algo de dinero enfoscaba sus paredes. Luis Maldonado ha invitado a profesores y expertos de Universidad de Castilla-La Mancha que están dispuestos a impartir una charla para hablar de este tema y explicar cómo eran los edificios de la época renacentista.