El Museo del Encaje recoge “la ilusión de un futuro compartido”

Araceli Monescillo y Eustaquio Jiménez han coordinado esta exposición sobre el ajuar almagreño

Ilusión, nervios previos a la inauguración y mucho trabajo, esos fueron algunas de las sensaciones que se pudieron percibir en la tarde noche de ayer con la inauguración de la exposición “El Ajuar, la ilusión de un futuro compartido”, que hasta el 20 de marzo podrá ser visitada en el Museo del Encaje de Almagro.

Toallas, ropa de cama, camisones, toquillas, mantelerías y un sin fin de detalles hacen de esta exposición un verdadero viaje a través de nuestra historia más reciente, un tiempo en el que “la dote” y el ajuar conformaban un aspecto fundamental de la vida familiar y personal, teniendo a la mujer como protagonista de la misma.

Especial mención merecen las fotografías y postales que aparecen en esta exposición “mostrando momentos muy especiales de la correspondencia entre los novios”, además de contemplar unas imágenes coloreadas que nos evocan tiempos cargados de un gran romanticismo.

La idea de esta exposición arranca de la investigación sobre el noviazgo y el matrimonio en el siglo XX que se planteó desde el taller de etnografía de la Universidad Popular de Almagro, “siendo el ajuar un elemento que merece la pena contemplar ya que era la herencia que las madres y las abuelas dejaban a las hijas, desprendiendo todas las piezas expuestas un gran cariño y amor” según comenta Eustaquio Jiménez, uno de los responsables, junto a Araceli Monescillo, del curso etnográfico y de esta muestra.

Igualmente, y según comentó Luís Maldonado, alcalde de Almagro, “la gente ha sacado los tesoros de sus casas, mostrando joyas de épocas muy antiguas que merecen ser contempladas y disfrutadas por todos los visitantes”. Las numerosas personas que asistieron a esta inauguración pudieron disfrutar igualmente de un ágape mientras que, de manera reposada, realizaron un “viaje en el tiempo” gracias a una exposición que acercará a los visitantes del Museo del Encaje a épocas que aunque lejanas en el tiempo, siguen presentes en nuestros días gracias a la labor e interés de personas como las que componen el taller etnográfico de la Universidad Popular de Almagro.

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