La actividad Versos libres a plena luz volvió a ser punto de encuentro de profesionales de la escena y público durante el Festival Internacional de Teatro Clásico
Durante todos los domingos de Festival, el Ateneo ha abierto un canal de comunicación, de charla amena coordinado por Roberto Mendés y organizado por el Ateneo.
El Parador ha sido punto de encuentro de periodistas y protagonistas del Festival Internacional de Teatro Clásico y también de público, amantes del teatro con profesionales de la escena.
Un año más, el Ateneo se ha unido al Festival con la actividad Versos libres a plena luz,una propuesta en formato de entrevista con carácter distendido y dialogante que ha permitido conocer directamente a quienes aportan profesionalmente su capacidad y su talento al mundo teatral.
Los encuentros, coordinados y conducidos por Roberto Mendés, comenzaron con el iluminador Pedro Yagüe, siguieron con las directoras de escena, Ana Zamora y Laila Ripoll y finalizaron este domingo con el actor Carlos Hipólito.
También el Ateneo de Almagro celebró una nueva edición de “a escena: teatro y moda”, en esta ocasión coordinado por Alberto Salván Zulueta.La gran acogida de público ha sido la tónica general con un aula magna del Parador repleta de asistentes, que en algunos casos, como en el encuentro con Carlos Hipólito se quedó más que pequeña y con personas de pie que no querían perderse su charla.
Un año más, el Ateneo se ha unido al Festival con la actividad Versos libres a plena luz,una propuesta en formato de entrevista con carácter distendido y dialogante que ha permitido conocer directamente a quienes aportan profesionalmente su capacidad y su talento al mundo teatral.
Los encuentros, coordinados y conducidos por Roberto Mendés, comenzaron con el iluminador Pedro Yagüe, siguieron con las directoras de escena, Ana Zamora y Laila Ripoll y finalizaron este domingo con el actor Carlos Hipólito.
También el Ateneo de Almagro celebró una nueva edición de “a escena: teatro y moda”, en esta ocasión coordinado por Alberto Salván Zulueta.La gran acogida de público ha sido la tónica general con un aula magna del Parador repleta de asistentes, que en algunos casos, como en el encuentro con Carlos Hipólito se quedó más que pequeña y con personas de pie que no querían perderse su charla.