El colegio Miguel de Cervantes cuenta desde hoy un purificador de aire con filtro Hepa en todas sus aulas

El colegio Miguel de Cervantes cuenta desde hoy un purificador de aire con filtro Hepa en todas sus aulas

La asociación de padres y madres agradece la colaboración de las empresas que han apoyo la adquisición de los 20 purificadores y 8 medidores. 

El colegio Miguel de Cervantes cuenta desde hoy, miércoles, con un purificador de aire con filtro Hepa, para todas sus aulas. En concreto se han instalado 20 aparatos para el gimnasio y las 18 aulas con alumnado La asociación de padres y madres agradece la colaboración a las empresas  que han apoyado la compra de estos aparatos purificadores y de los 8 medidores de CO2. El AMPA a través de los grupos de padres pidió colaboración de aquellos padres que tuvieran empresas. La respuesta fue muy positiva, por lo que las familias no han tenido que aportar dinero.  Las empresas son: Torytrans; Opticalia; Suministros Lozano Villaverde; Sergio Gómez Pradas; Frutas Alfonso Díaz; Taller móvil Jomago; Foto Luis; Aldene Cosmética Profesional;Frudiaz y Tiendas Nieves. Además, el AMPA ha colaborado con 2.000 euros y el ayuntamiento de Almagro con 1.000 euros, procedentes la aportación anual para actividades extraescolares y ayuda COVID. La compra de los 20 purificadores de aire y los 8 medidores ha costado 4.500 euros. La comunidad educativa del Colegio Miguel de Cervantes comenzó en el mes de octubre la recopilación de información sobre este tipo de purificadores. Tras conocer varios estudios y el informe de la Universidad de Castilla-La Mancha optaron por su instalación, teniendo en cuenta que este tipo de aparatos son una medida complementaria a la ventilación de las aulas.

Reproducimos parte de este informe sobre los filtros Hepa y los medidores:
“Las “capas de protección” en ambientes interiores son mascarilla, distancia social, ventilación e higiene. Sabemos que el uso de mascarilla es crítico para reducir la propagación asintomática del virus pero mantener la distancia de seguridad en el aire interior no sirve si no hay una buena ventilación. Una vez que el virus “se escapa” al aire dentro de un edificio, tenemos dos opciones: introducir aire fresco del exterior o eliminar el virus del aire dentro del edificio. El espacio interior más seguro es aquel que constantemente reemplaza el aire viciado interior con aire exterior diluyéndose así cualquier contaminante o virus. La tasa de intercambio de aire (o tasa de renovación) es una medida empleada para cuantificar el número de veces que el aire del interior es reemplazado por el aire fresco del exterior en una hora (ACH). Si bien esta tasa depende de la cantidad de personas y el tamaño de la habitación, la mayoría de los expertos consideran que aproximadamente 6 cambios de aire por hora son adecuados En un estudio realizado en Europa (Proyecto SINPHONIE), la mayoría de las escuelas de distintos países no cumplían con las tasas de ventilación recomendadas. Probablemente en nuestro país, suceda lo mismo. Por tanto, mantener las ventanas y puertas abiertas en las aulas es un comienzo. Cuanta más gente dentro, más rápido se debe renovar el aire. ¿Cómo podemos saber si el aula en la que estamos tiene suficiente tasa de renovación de aire?, la respuesta es midiendo el CO2. Cada ver que exhalamos emitimos CO2 al aire. Dado que el coronavirus se transmite con mayor frecuencia al respirar, toser o hablar, se pueden usar los niveles de CO2 para ver si la habitación se está llenando de exhalaciones potencialmente infecciosas. El nivel de CO2 nos permite estimar si entra suficiente aire fresco del exterior.

Se recomienda tener un medidor de CO2 en el aula para saber si la ventilación es buena. Al respirar exhalamos CO2 y una manera de determinar si hay buena ventilación es controlar que la concentración en el aula está por debajo de 800 ppm (partes por millón). En el exterior hay aproximadamente 400 ppm por lo que cuanto más cerca esté el valor del interior al del exterior mejor será. En la medición realizada hoy por el AMPA al aire libre en el patio del colegio, el medidor medía 575 ppm. Si es necesario hay que recurrir a la ventilación cruzada (ventanas y puerta en paredes opuestas o adyacentes) con el objetivo de diluir la concentración de aerosoles. Estos equipos portátiles con filtros HEPA se están recomendando para aquellos locales o habitaciones en los que no se puede ventilar adecuadamente, como puede ser un aula. Está entre las medidas para reducir la transmisión del COVID en los espacios interiores. Entre las instituciones que los recomiendan están: Ministerio de Sanidad y Transición ecológica https://www.miteco.gob.es/es/ministerio/medidas-covid19/sistemas-climatizacion- ventilacion/default.aspx: Asociación Científica Española de Enfermería y Salud Escolar (ACEESE) http://www.aceese.es/wp-content/uploads/2020/08/6ago20PLAN-ESTRATE%CC%81GICO-DE-ENFERMERI%CC%81A-PARA-EL-RETORNO-SEGURO-.pdf; Harvard T. H. Chan. School for public Health https://healthyschoolscampaign.org/dev/wp-content/uploads/2020/08/Harvard- Healthy-Buildings-Program-Schools-For-Health-Reopening-Covid19-June2020.pdf; REHVA COVID-19 guidance document. Federation of European Heating. Ventilation and air conditioning associations. https://www.rehva.eu/fileadmin/user_upload/REHVA_COVID- 19_guidance_document_V3_03082020.pdf
Por supuesto, esta medida con equipos portátiles con filtros HEPA es complementaria a la utilización de mascarillas, distancia social e higiene de manos como he comentado al principio. Además como también he comentado, sería recomendable combinarlo con la ventilación entre clases y en el recreo”.