María Huertas enseñó el camino a las estrellas

El segundo concierto de ‘Los veranos de Il Parnaso’ trasladó a los espectadores a la Edad Media con Stella Maris

Stella Maris, el camino a las estrellas, es más corto de lo que podemos imaginar, y más breve de lo que alcanzamos a soñar. Lo demostraron María Huertas e Il Parnaso Musicale en el segundo concierto de ‘Los veranos de Il Parnaso’, regalando una auténtica maravilla en forma de música medieval-zen con un repertorio mágico, relajado, amable y sutil.

Las voces de María y José Luis Huertas, quien también se hizo cargo de unas curiosísimas percusiones orientales, la maestría de Mª Jesús Calcerrada abrazando al laúd medieval y el maravilloso beso de Pepa Megina a las flautas de pico, volvieron a fundir y fusionar todo y a todos los que rodeaban a los músicos. Unos espectadores que, esta vez sí, se decidieron a levantarse y caminar, pasear y saborear la música y el entorno al mismo tiempo. El Claustro de los Dominicos volvió a ser ese lugar místico y perfecto, como pensado para este tipo de propuestas.

La sorpresa llegó en la recta final, cuando María hizo partícipes a los espectadores invitándoles a cantar. Y lo hicieron, hombres y mujeres a coro junto al sonido de los instrumentos provocando la unión total. Maravilloso, así fue este segundo concierto. Pero las citas con Il Parnaso siguen, ya que el próximo sábado 13 tendrá lugar el tercer y último concierto en el Claustro de los Dominicos con música del Renacimiento. Los dos últimos encuentros tendrán como escenario otro emblemático lugar de la ciudad encajera, el Corral de Comedias. Será los días 20 y 21 de agosto.

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