La profesora Montserrat Rayo presenta Cuentos con Historia. “Del Guadiana al Alacranejo”

Presentación del libro

La narración surge del proyecto de innovación educativa “Mi pueblo cuenta su historia” para explicar a sus alumnos uno de los hechos más desconocidos y claves de la Historia de Almagro y su comarca, el traslado de la Orden de Calatrava al castillo sacro convento de Calatrava La Nueva.

Montserrat Rayo Olmo es profesora de Educación Primaria. Su pasión por la Historia y sus ganas de transmitir a sus alumnos todo lo que sabe de caballeros, guerreros calatravos, reyes, ciudades amuralladas… le han convertido en “cuentista” o quizás fue al revés, siempre fue “una cuentacuentos” como dijo el historiador José Lorenzo Sánchez Meseguer durante la presentación de su recién publica obra.

“Cuentos con Historia: “Del Guadiana al Alacranejo”, editada por Círculo Rojo con ilustraciones de Encarnación Asensio.

La publicación, de una treintena de páginas, relata lo que debió ser el traslado de Orden de Calatrava del castillo de Calatrava la Vieja (Carrión de Calatrava) al sacro convento de la Calatrava La Nueva (Aldea del Rey) hace 800 años en 1217. Montserrat Rayo escribió este hecho pensando en sus alumnos con la intención de que conocieran y aprendieran la historia de Almagro y su comarca, de una manera más amena y atrayente. Sus protagonistas son Almagrín el Pillín y Don Duro Sarmiento de la Cepa Seca y del Mosto Agrio, dos “periodistas” de antes que recorrían el Campo de Calatrava en busca de sucesos que contar a las buenas gentes de la comarca. Al salir al camino se toparon con este acontecimiento trascendental: la Orden de Calatrava- monjes soldados- se trasladaba desde su ciudad amurallada hacia un castillo y sacro convento de nueva edificación. La narración- combinación de realidad histórica y ficción- fue locutada y representada por chavales del centro educativo almagreño, donde ha dado clase durante este curso escolar, el colegio Miguel de Cervantes.

Fue uno de los hechos históricos que los alumnos de Primaria conocieron a lo largo del curso enmarcado en el proyecto de innovación educativa “Mi pueblo me cuenta su historia”. La autora, durante el acto de presentación que tuvo lugar en el Patio del almacén de Fúcares, agradeció la colaboración de todos los que hicieron posible la teatralización del cuento que también tuvo lugar en Fúcares. A Consuelo Pérez y Arturo Fernández que “dieron vida certera con su magnífica recitación de los textos a los personajes protagonistas; a Justo Vicente Fernández Pedrero por poner a mi disposición sus estupendas bandas sonoras originales de película, que crearon el ambiente idóneo que nos transportó a ese momento histórico y a los alumnos y alumnas del colegio “Miguel de Cervantes” (nombrados uno a uno) porque “pusieron su encanto y saber hacer, pero también “un enorme sacrificio, porque nadie sabe lo que duro que es quedarse ensayando en los recreos mientras el resto de compañeros se van a jugar”. Montserrat Rayo contó que su vena “cuentacuentos” y de reportera comenzó en su infancia.

Le gustaba imaginar y vivir miles de aventuras. Como ejemplo, Rayo compartió uno de los episodios de su niñez que recuerda con cariño, la recreación de la llegada del hombre a la Luna con sus amigos en el silo del pueblo catalán en el que vivía. También mencionó sus andanzas, subida a lomo de un caballo o de Voluntario, el mulo de su abuelo Antonio. Años después, se hizo maestra y pensando en esos alumnos que como ella era, son algo distraídos o la materia es de “difícil entendimiento, recurro improvisadamente a contarles un cuento o a hacerles algunos versos con un intríngulis chocante. Y de esta manera es como abordo temas que van desde la aritmética matemática, hasta una etapa histórica, pasando por normas de aula o de ortografía… y todo ello en un sin pensar, vaya”.

Así, como la autora explicó “podréis imaginarme a cuatro patas, irguiéndome paulatinamente mientras explico los motivos por los que el ser humano evolucionó hasta tomar la posición erecta; o inventando el momento en el que el ser humano sintió por primera vez el sentimiento de pena al ver el fallecimiento de sus seres próximos; o bien cómo decidían enterrarlos en el hogar para tenerlos presentes una eternidad; o plantear contenidos tan áridos como el procedimiento de la división, haciéndolo con rimas y poemas”. De esos narraciones improvisadas no hay registro, pero sí de uno de las historias contadas durante este pasado curso por su autora,“ Del Guadiana al Alacranejo”, que contiene un código QR con el que se puede disfrutar también de la interpretación de Consuelo Pérez y Arturo Fernández y de la música de Justo Fernández.

Foto cedida M. Cieza