Casi 200 personas disfrutaron de la ruta que por cuatro año consecutivo ha organizado la asociación cultural Almágora

“Hágame usted en ese solar un gran patio y buenos corredores, si terreno queda hágame usted habitaciones”. Con esta frase de Joaquín Hazaña de su obra La casa sevillana, comenzó Almágora este pasado fin de semana la IV Ruta Guiada de Patios por la ciudad de Almagro. De éxito  tilda Elena Bautista, miembro de la Junta directiva de  la asociación almagreña, “83 personas el sábado y 95 el domingo, fueron quienes nos acompañaron, hemos sobrepasado el cupo que nos habíamos propuesto para cada día, además de la gente que se ha acercado y llamado hasta última hora y hemos tenido que decir que no había plazas”.

Los patios- explica- llaman la atención, no sólo entre los almagreños sino gente sobre todo de Ciudad Real quien ha venido hasta la ciudad encajera para acompañar a Almágora de Daimiel, Valdepeñas, Toledo, Madrid, Cataluña. “Están los patios de Córdoba en mayo, los patios de Toledo durante la semana del Corpus y los patios de Villanueva de los Infantes ahora en octubre, pero ya comienza a hacerse un hueco los Patios de Almagro en el mes de septiembre” dice el presidente de Almágora, Isidro Hidalgo.

Este año el formato ha cambiado. Almágora ha propuesto seis patios para los dos días y en horario diferente, de noche y de día para poder visitar el mismo patio y ver cómo cambia, “hacernos sentir o percibir su esencia  y vida”. La ruta guió a los asistentes por patios de diferentes épocas y estilos.  Así, visitaron patios con galerías y columnas ochavadas y borlas que recuerdan el gótico final, pasaron al patio del Mesón del Toro o de la Sangre o de la Fruta, convertido en Corral de las Comedias. También pisaron el antiguo Hospital de los Caballería bajo la advocación de San Jerónimo que hoy es vivienda particular con patio y salón con un alfarje del siglo XVI. La ruta continuó por la calle Feria en un patio transformado durante el último cuarto del siglo XIX por una familia de clase media alta allá. Conserva la esencia pero con materiales nuevos como el hierro fundido en columnas estriadas y capiteles con hojas de acanto. Esta vivienda tiene un segundo más patio más tradicional con su pie derecho de madera y balaustrada de madera, patio de labor o de servicio, que daba comunicación a las cuadras, trasteros y cámaras.

En la calle Bernardas, una vivienda viva, habitada y que guarda en su pequeño patio verde esmeralda un escudo que espera ser descifrado. La propiedad mostró orgullosa un secreto, su cueva en forma de L donde antaño se celebraban fiestas y reuniones familiares. La cuarta ruta guiada por los patios de Almagro finalizó su recorrido en el palacio que reza sobre la puerta Palacio de los Xedler, pero que no fue ni de los Xedler, ni Juren, ni Fugger. Fue una gran casa palacio que guarda en sí la vida que fue de una gran familia a través de tres patios. Almágora finalizó la ruta con el anuncio de que se ha conseguido el dinero para la consolidación de las pinturas de la capilla de los Orduño en el Convento de la Encarnación de Almagro.

Almágora  da las gracias a cada uno de los propietarios de esos patios por “dejarnos invadir un año más esa intimidad y privacidad que guardáis en estos vuestros patios- en palabras de Isidro Hidalgo-. También agrade la autorización por parte del Ayuntamiento de Almagro del Corral de Comedias, a las empresas y personas que se han publicitado y a aquellas que de manera anónima han dado su colaboración pero no han querido aparecer. *Ver imágenes*