El Museo del Encaje y la Blonda, más accesible

Silla Adaptada

El Ayuntamiento de Almagro ha instalado una silla adaptada a las escaleras que permite a las personas con discapacidad física o movilidad reducida visitar las tres plantas del museo dedicado al encaje almagreño.

El Ayuntamiento de Almagro ha instalado esta semana una silla adaptada en el Museo del Encaje y la Blonda para que las personas con discapacidad física o movilidad reducida puedan visitar las tres plantas del edificio que alberga el museo municipal. La silla se ha colocado en las escaleras de acceso a la planta baja del edificio que permite conocer todas las salas del museo desde la planta baja.

Desde este punto, la persona puede subir al resto de las plantas a través del ascensor. Además, el alcalde de Almagro, Daniel Reina, ha explicado que en unos días también coloarán una rampa en los escalones que separan la primera planta del ascensor para solventar también esta barrera arquitectónica.

La silla adaptada (10.000 euros), que recibe el nombre de silla salvaescaleras, ha sido financiada por parte de una ayuda nominativa que recibió el Consistorio de la Diputación Provincial de Ciudad Real. El Ayuntamiento de Almagro sigue apostando por la accesibilidad. La anterior Corporación Municipal eliminó eliminado las barreras arquitectónicas físicas del Corral de Comedias, de la iglesia de san Agustín, de la entrada al Museo del Encaje y la Blonda, de la Biblioteca Municipal, de la Concejalía de Urbanismo, del centro de ocio, etc., además de la peatonalización y arreglo de varias calles para mejorar la accesibilidad. La actual Corporación continúa trabajando en la misma línea de conseguir una ciudad más accesible para vecinos y turistas. Entre las actuaciones llevadas a cabo estos últimos meses, la instalación de una silla adaptada en la piscina municipal, la eliminación de bordillos en varias calles como en Vistillas de Santiago, en el Ejido de Calatrava a la altura de la estación de autobuses, en la calle Conde de Barcelona o la retirada de la farola que interrumpía el paso de los viandantes también en la acera de la estación de autobuses.

Museo del Encaje y la Blonda también interactivo y didáctico

El Museo del Encaje y la Blonda cuenta desde abril de 2014 con una zona interactiva y didáctica. El visitante puede probar a hacer bolillos con sus propias manos. Hay tres almohadillas con tres niveles de dificultad. Si no sabe nada, aprenderá los movimientos básicos necesarios para elaborar cualquier encaje que son la cruz y la vuelta. Si sigue las instrucciones del panel informativo o las explicaciones del personal del museo, podrá pasar al segundo nivel de dificultad y realizará el fondo básico del encaje de almagro, conocido con el nombre de “carrerillas” o fondo de tronchón y aprenderá a sujetar las cruces con las agujas. Y si se atreve, pondrá probar realizar con el tejido, el lenzado, con lo que se hace la base del dibujo, del motivo que lleva el encaje, normalmente, flores, hojas…

El Museo Municipal de Encaje y Blonda, que abrió sus puertas en 2004, cuenta con fondos propios, entre los que merece destacarse la donación de una importante colección de picaos, efectuada por los herederos de D. Toribio Martínez (encajero de la ciudad), compuesta por piezas de diferentes épocas y formas, mostrándonos la riqueza y variedad de formas y usos que, a lo largo del tiempo, ha tenido esta producción artesanal. Además se muestran piezas ya confeccionadas de encaje de bolillos, con variedad de formas y dibujos: lenzado, medio punto, guipur, punto encontrado, bretón, etc., utilizando para ellos motivos geométricos, florales, animales, etc. Los fondos del museo se completan con una muestra de trabajos de encaje realizados con seda natural descruzada, la Blonda, con cuya técnica se realizan pañuelos, velos, abanicos y sobre todo la famosa Mantilla de Almagro y otra sección dedicada a los utensilios con los que se elaboran los trabajos: almohadillas, picaos, bolillos, etc.